miércoles, 25 de enero de 2012

A 15 años del primer round de la Mole



Cuando diversos medios publican la versión de que Fabio Moli enfrentaría a George Arias, por el Título Sudamericano de los Pesados en el Estadio Delmi de Salta el día 12 de Mayo, el diario "Día a Día", en la Sección Deportes de su versión digital, publicó hoy una nota que reproducimos a continuación.

Hoy se cumplen 15 años del debut profesional de Fabio Moli como boxeador. Fue en Carlos Paz, donde hoy es actor.
Aquella cálida noche, el Polideportivo Municipal de Carlos Paz tenía sus luces prendidas. La gente se acercó, mientras el humo de los choris se adueñaba del cielo de aquel recinto de rara fisonomía. El grandote se subió al ring, ante la mirada descreída de los presentes. Enfrente, el chaqueño Alberto Comán se paraba para hacerlo rendir su primer examen.
El entonces desconocido Fabio Eduardo Moli trepó al cuadrilátero y exhibió su short negro, con medias al tono, zapatillas blancas y ese par de guantes verdes que por primera vez vistieron sus puños de profesionales. Hoy se cumplen 15 años del debut entre los rentados del boxeador más famoso que salió de nuestra provincia en las últimas dos décadas. Sí, fue en la villa serrana, esa que hoy lo tiene entre los integrantes de la farándula que la coparon y que la transformaron en el centro del verano 2012.
El inicio. “Cuando arranqué, hace 16 años, Vladimiro Sodero, mi inventor, me dijo: ‘¿Querés boxear?’. Le contesté: ‘¿Me van a pagar?’. Y empecé en un galpón con un par de guantes y una bolsa, rodeado de fardos, gallinas y chanchos”, recuerda siempre la Mole.
Aquel combate, Moli lo ganó por puntos. Tenía 27 años y apenas 10 peleas de experiencia como amateur. Arrancó con la timidez del que desconoce, hasta que empezó a largar sus golpes. Primero un jab, después un 1-2. Hasta que la nomenclatura quedó en el rincón y los mazazos que largó se volvieron envíos innombrables hasta para Rubén Torri.
Pero lo mejor de él se ve bajo el ring. Su personaje sin almidón, de ocurrencias frescas e inesperadas marcan en el corazón del público a un tipo sin libreto y natural. La simpleza de sus "culeau" se cavan profundos en el compasivo paladar de los degustadores de personajes nacidos para ser queridos.
Ojo, tuvo sus hitos. No se puede desconocer la noche que llevó 8 mil personas a Juniors, cuando noqueó a Jorge Dáscola, su actual mánager. Sí, también pasó ese golpe fantasma de Vladimir Klitschko que lo tumbó en Alemania.
Pero si de golpes se trata, La Mole tuve ese golpe de suerte para pelearle a la vida, tras el Bailando por un Sueño. Hoy, aquel peón rural y albañil disfruta de las luces de la fama. Aunque el boxeo todavía le tira: “Después de la temporada de teatro en Villa Carlos Paz, voy a prepararme para pelear por el título sudamericano ante el brasileño George Arias”.